martes, 24 de noviembre de 2015

Entrevista a Sylvina Bordino. De: Mayra Pagano

Sylvina Bordino, artista plástica


Por Mayra Pagano

 Sylvina es una mujer que desde pequeña se interesó por el arte y empezó a estudiar en Bellas Artes ya de grande. Ahora dedica su vida plenamente al arte abstracto y demás técnicas.














MP:-¿Qué fue lo que te atrajo del arte como para estudiar y dedicarte a ello?

SB:- Lo primero que me atrajo cuando era muy chica fue el dibujo. Fui a un taller y me encontré con un mundo dentro de mí. La profesora nos llevó a visitar la Cárcova, que en ese momento funcionaba como escuela. Ahí fue el momento decisivo en el que me di cuenta de que quería estar ahí, aunque con el tiempo fui descubriendo el arte en mí y afuera como algo atractivo.

MP:-¿En qué te inspirás para la creación de tus obras? ¿Es sólo una cuestión de inspiración o hay también mucho trabajo en la creación?

SB:- (Se ríe) La pregunta del millón… Hay muchas teorías sobre la inspiración. Hay una platónica, que sería como si la inspiración viniera de los dioses o musas, y luego hay otra que dice que el trabajo se va construyendo a partir de cómo avanza la obra.
 Por mi parte, creo que tengo una mezcla de las dos. La forma que se va haciendo e igualmente viene una idea detonante que tiene que ver con uno mismo. Las obras siempre hablan de la forma de ser del artista y de su concepción del mundo.
 También generalmente viene una idea de algo que viste, que te impactó o de algún tema. Usualmente yo investigo sobre eso pero no para quedarme en esa investigación sino como un aporte interno, ya que la obra en sí me va llevando, se qué elementos va a tener, si voy a incorporar algún material en especial o no. Aún así no lo defino mucho ya que luego te limita; cuando uno piensa en la obra como algo ya terminado en general es la peor obra que vas a hacer.

MP:- ¿Cuáles son las ventajas y desventajas de vivir del arte?

SB:- Si llegás a vivir del arte es la mayor felicidad que puede tener un artista. También se puede vivir de la docencia en el arte, lo cual también es hermoso, ya que te nutrís viendo lo que los demás desarrollan y guiándolos en el desarrollo.
 Hay ciertas personas que tienen la habilidad comercial o de ubicarse con los contactos. Hay otros que trabajan más lentamente: de a poco van generando muestras y vendiendo. Pero el sostén fundamental generalmente es la enseñanza.
 Argentina no es un mercado muy grande, aún así hay gente que tiene el privilegio o la suerte de hacerse conocido en el mercado y poder vivir del arte.
 Yendo hacia las desventajas, lo único malo que le veo es, en caso que pase, es que el artista se estereotipe y empiece a hacer un arte que guste y venda y olvide cuál es su búsqueda.

MP:- Al haberte recibido de docente de arte, ¿Nunca consideraste dar clases? ¿Por qué?

SB:-No consideré dar clases dentro del ámbito institucional. He observado que los chicos, los que van a talleres, tienen las ganas de desarrollar en el taller pero en ámbito escolar tienen esa visión de “es para la escuela” y lo devalúan.
 He visto cosas hechas en la escuela maravillosas, pero el tiempo, la materialidad, el espacio que se destina al arte es muy escaso salvo raras excepciones.
 Entonces prefiero dar clases cuando alguien está interesado, hasta becaría a alguien con el fin de enseñarle si quiere.
 De cualquier manera, es admirable el trabajo de los profesores que a veces tocan una fibra y un alumno se empieza a interesar en esa materia, tanto arte como cualquier otra, y la siga por ese profesor. Muchas veces la pasión nace en la escuela, aunque no fue mi caso ya que iba a una escuela comercial lamentablemente.

MP:-¿Qué clase de arte te gusta más y realizás más a menudo? ¿Por qué preferís esa sobre otras?

SB: Esencialmente pinto, me gusta mucho el dibujo pero nunca me llevé bien con el grabado ya que requiere un grado y prolijidad y laboriosidad que la mayoría de las veces no se ve reflejado en el resultado final o simplemente no queda como uno quiere.
 Por parte del dibujo trabajo mucho con tintas chinas, en cáustica que es una técnica antigua que se utiliza con cera y pigmentos en caliente.
 También trabajo con materiales no tradicionales como claucol, elementos como piedras, espejos, etc.
 Además de todo eso me gusta bastante la escultura. No es mi especialización, pero ahora estoy trabajando más con arcilla y en otras oportunidades hice tallado.
 Otra cosa con la que trabajo mucho es con el error, en vez de buscar una manera de corregirlo lo sigo para ver a donde sigue la obra.

MP:- ¿Qué consejos le darías a alguien que quiere ser artista?

SB:- (Se ríe) Sobre todo que persista, que trabaje y que, principalmente, no se deje reprimir por los demás con cosas como “No podes vivir de esto” y demás. Eso era un poco mi problema familiar, por algo me anotaron en una escuela comercial que no tenía nada que ver conmigo.
Por eso la falta de apoyo a veces es condicional y a veces no, todo depende de tu constancia.
 Yo creo que hay que ser apasionado en lo que uno hace,  ya que no hay nada mejor que dedicar tu vida a lo que te gusta y no aburrirte de ello.


domingo, 13 de septiembre de 2015

El Reloj de arena

 Era mi cumpleaños. Aiden, mi mejor amigo, me había regalado un reloj de arena. Uno diría que es un regalo un tanto extraño, pero se adaptaba perfectamente a mis gustos.
 Lo coloqué en la repisa de mi habitación ya que me gustaba observar cómo caía la arena por las noches, aunque también daba vuelta el reloj cada vez que pasaba por la repisa.
 Día tras día, antes de ir al colegio, cuando regresaba, siempre daba vuelta el reloj.
 Empezaba a sentir que mi tiempo dependía de él, sentía que mi tiempo pasaba conforme la arena caía.
 Me estaba desesperando, así que fui a consultar a Aiden sobre el reloj. Tal como imaginaba, él no tenía idea de por qué pasaba eso, hasta me planteó la posibilidad de que estuviera delirando. Quería consultarlo con alguien más, pero asumí que nadie me creería.
 Pasaron varios días en los que estuve encerrada en mi habitación, pensando, buscando una explicación lógica para todo esto. Pero no encontré razón alguna para que aquello fuera lógico, siquiera posible.
 Después de un tiempo Aiden vino a mi casa, preocupado porque no salía ni para ir a la escuela desde hacía tiempo. Lo primero que hizo fue disculparse por dudar de mi estado mental y luego ofreció llevarse el reloj para ver si lo que sucedía era cierto. Antes de irse me aclaró: "No voy a dar vuelta el reloj como vos lo hacías, espero que no haya problema...".
 Pasó un largo tiempo en el que no vi a Aiden, creí que simplemente no tuve la oportunidad de cruzarme con él así que no le di mucha importancia. Pero, todo cambió cuando recibí una llamada de la madre de Aiden. Fue bastante extraño, estaba llorando y era difícil entenderla, pero entre sus balbuceos pude entender algo: "Aiden está muerto". Esto simplemente me paralizó, ¿Aiden? ¿muerto?, no podía ser posible. Traté de pensar en qué podría haber pasado, y entre todas las posibilidades solo una destacaba en mi mente "el reloj", por más que me lo negaba y decía que era imposible era lo único que me parecía acertado. Ignoré mis pensamientos y le pregunté rápidamente a la madre si sabía cómo había muerto, me dijo que simplemente lo encontró muerto en su habitación y su cuerpo no tenía ninguna lesión, tampoco había señales de posible ahogamiento.
 Esperé a los resultados de la autopsia, sólo porque quería sacarme la estúpida idea de que hubiera sido culpa del reloj, pero cuando llegaron los resultados no fueron para nada satisfactorios, ya que tampoco encontraron algo que pudiera haber sido causante de su muerte.
 Así quedó, nunca se supo la verdadera razón por la que Aiden murió y mi mente quedó estancada en una sola respuesta que nunca le podría decir a nadie.


                                                                FIN 

domingo, 24 de mayo de 2015

Crónica

4 de mayo de 2015
Un hombre de 45 años fue asesinado en Boedo


Vecinos testifican que el asesino fue su vecino del al lado de 38 años


 En el día de ayer, en la calle Constitución al 2900 en el barrio Boedo, fue asesinado el señor Hector Gutiérrez de 45 años. Este fue apuñalado por su vecino Salomón Ramirez de 38 años de edad aunque todavía se desconoce el porqué.
 Varios vecinos dejaron sus testimonios sobre el incidente: "Hector y Salomón no eran de llevarse bien, muchas veces los vi salir de su casa gritándose entre sí. Tal vez el odio impulsó a Salomón a cometer tal atrocidad", dijo el vecino de enfrente. Su otra vecina de al lado dijo: "Según se rumoreaba por el barrio, Hector y Salomón alguna vez fueron buenos amigos. No sé que habrá pasado entre ellos. Lo que sí puedo afirmar es que Salomón le tenía mucho odio. Yo pude presenciar brevemente el asesinato por la ventana de mi casa y se podía ver que lo apuñalaba con mucha ira".                                                                                                                         Los policías que fueron a investigar la casa                                                                                              donde ocurrió el crimen.
  

 Por otra parte, cuando revisaron el cadáver de la víctima encontraron que estaba lleno de cuchilladas por todo el cuerpo. Como si, tal como sospechaban los testigos, hubiera querido que la víctima sufriera antes de fallecer. Sin duda alguna, un acto atroz y horripilante que no debería ocurrir nunca más.